El pasado 23 de julio de 2011, la AZAFT tuvo el placer de acompañar a la Asociación de Amigos del Ferrocarril de Madrid (AAFM) en su viaje a Zaragoza, aprovechando la situación para trasladar a Casetas los coches de nuestra asociación que se encontraban en Madrid tras pasar la revisión correspondiente en Siderúrgica Requena.

La estrella del viaje fue el nuevo coche de Correos. Foto: Jorge Almuni

La composición estaba formada por la locomotora 269-604 (Gato Montés, de AAFM), el coche segunda/literas Bc10x-9628, el coche de primera clase A10x-10034 (ambos coches de refuerzo de los Estrella de Renfe Operadora), nuestro restaurante WR-3567, el coche estafeta DGCT-1529 (en su primera circulación tras su restauración como vehículo histórico) y el coche salón SS-1.

Recogiendo el tren en Casetas. Foto: Jorge Almuni

El tren partió de la estación de Madrid-Chamartín, a donde los socios de la AZAFT llegaron por sus propios medios: coche, autobús o en el Estrella Costa Brava. La inusual composición fue fotografiada por multitud de aficionados de los alrededores de Madrid, impresionados por el contraste de épocas existente entre los coches de viajeros actuales en servicio y los coches de viajeros de la década de 1930.

Durante el trayecto, el personal de la AAFM ofreció porras con chocolate a aquellos que se acercaban al Coche Restaurante, recuperando (aunque de forma mucho más modesta) el trasiego de viajeros que se organizaban por turnos para ir a desayunar. También se pudo disfrutar de la visita inaugural al recién restaurado coche estafeta DGCT-1529, la gran sorpresa del día.

Parada fotográfica de locomotoras. Foto: Jorge Almuni

A la llegada del tren a Casetas, el personal de la AZAFT realizó las maniobras pertinentes para sacar el resto de la composición del Tren Azul a la playa de vías, para que así pudiera ser visitada por los viajeros de la AAFM. Tras la jornada ferroviaria de la mañana, los viajeros pudieron reponer fuerzas en el Pabellón Socio-Cultural de Casetas, donde se había preparado una paella gigante para comer.

Por la tarde, mientras parte del personal de la AZAFT guardaba la composición (incluidos los tres coches recién trasladados), algunos miembros de la asociación actuaron como anfitriones en la visita de la AAFM al nuevo Tranvía de Zaragoza, recorriendo parte de la línea y realizando fotografías al material móvil de la misma.

La Gata va a buscar a los socios de la AAFM. Foto: Jorge Almuni

Al final de la tarde, la Gato Montés y los dos coches de Renfe recogieron a los viajeros en la estación de Zaragoza-Delicias para volver dirección Madrid, tras una jornada ferroviaria que todos pudimos disfrutar y en la que sin duda la clave fue la colaboración entre asociaciones. De parte de la AZAFT todo nuestro agradecimiento a la AAFM, tanto por el traslado de los vehículos como por permitirnos disfrutar de un día de trenes en hermandad.

Lo importante son las personas. Equipo de la AAFM y la AZAFT trabajando juntos.