En pleno siglo XXI, los herederos de Carde y Escoriaza, CAF, vuelven a ser los encargados de crear un tranvía que cumpla los requisitos de la nueva red de Zaragoza. Esta empresa ubicada en Zaragoza y con gran experiencia en el mundo ferroviario, ha diseñado una nueva evolución, la tercera, de su tranvía Urbos.
Los nuevos tranvías fueron numerados del 3010 al 3220, en donde el último dígito indica la posición de la caja dentro de una misma composición, y realizaron las pruebas de funcionamiento desde el día 24 de noviembre de 2010 al 19 de marzo de 2011 para poder ajustar los equipos y sistemas, más un mes de viajes en blanco para realizar ajustes de la explotación.
Para el tramo de línea que está en explotación desde el 19 de abril se han previsto once unidades, nueve para el servicio regular en hora punta más una de reserva. Además, CAF construyó en el tranvía número doce un laboratorio para experimentar nuevos componentes; finalizado el periodo de pruebas y ensayos fue adaptado para circular con el resto de tranvías, siendo actualmente idéntico al resto de la flota. La primera unidad tranviaria llegó a la cochera de Valdespartera el día 26 de octubre de 2010, recibiéndose el resto de tranvías durante el primer semestre de 2011.
Las características técnicas de los nuevos vehículos son: ancho de vía internacional, bidireccionales, cinco cajas articuladas con puertas a ambos lados que le otorgan una longitud total de 33 metros.
Sus generosas dimensiones, con una altura de 3600 mm y una anchura de 2650 mm, generan en su interior un espacio amplio en el que las personas con movilidad reducida pueden moverse libremente gracias al 100% piso bajo y a su baja altura respecto de la calzada, entre 270 mm y 300 mm, permitiendo acceder a su interior sin necesidad de andenes de consideración. Esperemos que su anchura excesiva de caja no suponga un problema cuando se amplíe la red, como ya ha ocurrido en Sevilla y ha obligado a la sustitución completa del material móvil.
Con capacidad para 52 personas sentadas y 200 de pie, garantizara el acceso de bicicletas, carros de bebé y cuatro espacios para personas de movilidad reducida, consagrándose como el transporte urbano de mayor capacidad de la ciudad.
Se alimenta a través de la catenaria a 750 Vcc y posee tres bogies, dos de ellos motores, contando en total con 8 motores de 60 kW de potencia cada uno, dispuestos longitudinalmente para un fácil acceso lateral en caso de avería o mantenimiento a través de unas pequeñas trampillas, sistema originario del Combino de Siemens. Toda esta potencia le garantiza una velocidad máxima de 70 km/h con una aceleración de 1,4 m/s², aunque siendo un tranvía enteramente urbano no circulará a más de 50 km/h. Cuenta además del freno eléctrico, con freno hidráulico y patín electromagnético al carril, asegurando un gran par de frenado en caso de emergencia.
La característica más innovadora del Urbos III es el sistema ACR de almacenamiento de energía en el propio tranvía, mediante un conjunto de baterías y ultra-condensadores que le permiten recuperar energía durante el frenado del convoy, pudiendo ser aprovechada después. Con este sistema, reforzado con un sistema de carga en las paradas, mediante un patín inferior, se garantiza la circulación del tranvía sin necesidad de catenaria durante cortos espacios de tiempo.
En el tramo entre la Plaza de Basilio Paraíso y la sede de Aragón Televisión en el barrio del Actur (La Chimenea) se circula sin catenaria, una imposición política que ha conllevado que Zaragoza sea pionera en la implantación del sistema ACR, aunque sin valorar sus futuros costos de mantenimiento y su alto costo de implantación en los vehículos. Veremos qué resultados da la solución de CAF.